Kevin Love resucita para los Cavaliers; DeRozan, baja indefinida

NBA sábado, 29/11/14

Cambiaron los suspiros de Kevin Love. Del agobio y la frustración, al alivio. Aunque tan sólo sea pasajero.  El ala-pívot lideró con 28 puntos y 10 rebotes la victoria de Cleveland Cavaliers frente a Indiana Pacers por 109-97. Desde el salto inicial los de David Blatt marcaron el tempo del partido, con LeBron James como imán que cohesionó a los suyos para engranarse.  James acabó con 19 tantos quedando relegado a una tercera posición en la escala del ‘Big-three’, pues Kyrie Irving se fue hasta los 24 puntos y 10 capturas. Indiana realizó un partido muy flojo, aunque tuvo la virtud de que todos fueran partícipes y ninguno desentonara. Sin embargo, la falta de una referencia les condenó.

La capital albergó el partido más disputado de la noche, en la que los locales Washington Wizards se alzaron con el triunfo frente a los New Orleans Pelicans por 83-80. Pegajosos, ninguno de los dos bandos permitió que el otro se fuera, pero finalmente los Wizards lograron imponer, quizás, su mentalidad de cotas más altas. Marcin Gortat fue fundamental, con 24 puntos y 13 rebotes, sin encontrar oposición en el equipo rival. Anthony Davis aportó 30 puntos y 13 capturas, pero los Pelicans echaron de menos la aportación de otros activos claves como Tyreke Evans, que se quedó en 4 puntos con 2 de 15 en tiros de campo. En New Orleans se colocan con balance negativo.

Parecía propicio que Philadelphia 76ers consiguiera su primer triunfo ante unos Dallas Mavericks que jugaron la pasada madrugada y que no contaban con el héroe alemán, Dirk Nowitzki, siendo de la partida. Sin embargo, nada más lejos del espejismo, Dallas venció 103-110. Fueron contestones los Sixers, liderados por el triple-doble de Michael Carter-Williams (18 puntos, 10 rebotes y 16 asistencias), pero el rol asumido de cada uno de los jugadores de los Mavericks, así como el paso adelante de Tyson Chandler (20 puntos y 13 rebotes) acabó por dibujar la decimosexta derrota de Philadelphia.

Y además…

·         El hombre de las dos caras, James Harden, volvió a dar un recital con 34 puntos, 6 rebotes y 8 asistencias en la victoria de los Houston Rockets frente a los Milwaukee Bucks por 103-117. Domantas Motiejunas le escoltó con 20 tantos, mientras que en los BucksJabari Parker sumó 19 puntos y 9 rebotes con 13 de 14 en tiros libres.

·         Los Angeles Clippers han cogido impulso y tras doblegar a Houston Rockets ayer hicieron lo mismo con Utah Jazz (96-112). Blake Griffin firmó 28 puntos, mientras que Jamal Crawford desde el banquillo hizo 22. Chris Paul, con 17 puntos  y 10 asistencias, orquestó el ataque de los Clippers. En los Jazz, Gordon Hayward, con 30 puntos, volvió a ser el máximo anotador.

·         Sin piedad, los Atlanta Hawks alzan el vuelo surcando los cielos en busca de presas para afianzarse en los Playoffs. Anoche lograron apabullar a los Charlotte Hornets105-75, con 18 puntos de Paul Millsap como líder en un choque que poca historia tuvo y permitió la participación relajada de muchos hombres de rotación.

DeMar DeRozan, baja indefinida

Tras lesionarse en el partido que les enfrentó a Dallas Mavericks hace dos noches, DeMar DeRozan sufre una lesión en el tendón del abductor izquierdo y permanecerá en el dique seco sin fecha pronosticada para su regreso. DeRozan ha sido un jugador clave en el gran inicio de Toronto Raptors con unos promedios de 19’4 puntos, 4’2 rebotes y 2’6 asistencias.  Como remarca Steve Aschburner, hasta el momento el escolta había sido un jugador muy entero con respecto a las lesiones habiéndose perdido tan sólo 10 encuentros de los 394 que se han disputado desde que llegó a la NBA hace seis años.

Philadelphia 76ers, al borde del abismo

Con la derrota obtenida ante Dallas Mavericks y una vez superado el récord negativo de la franquicia como peor arranque (1972-73), Philadelphia 76ers se sitúa en un elenco deshonroso en el que cinco equipos tuvieron una marca de 0-16 o peor. Con ese balance, además de los Sixers, se encuentran los Clippers de 1994-95; con 0-17, de nuevo los Clippers de 1998-99 y los Heat de 1988-89; pero el récord lo tienen los desangelados Nets de 2009-10 con un balance de 0-18. De no ganar en sus tres próximos encuentros, Philadelphia 76ers se quedará como la franquicia con el peor comienzo de la historia de la NBA. Urge la honra de la franquicia.

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